Sport Zone expande su implementación de tecnología RFID a ocho de sus tiendas, luego de que un piloto aumentara la precisión del inventario a un 99% y aumentara las ventas. La empresa espera recuperar la inversión un año después de implementar la solución RFID que la ayuda a monitorear la mercadería desde que sale del centro de distribución hasta que se coloca en el piso de ventas.
Sport Zone comenzó a probar la tecnología en Abril del 2015 al etiquetar y monitorear todas las prendas y todo el calzado en dos de sus tiendas. La tecnología incluye el hardware de Avery Dennison y Zebra Technologies, como también el software de Tyco Retail Solutions.
Sport Zone vende ropa deportiva y material deportivo, como equipo de campamento, bicicletas, pelotas y cintas de correr en sus 120 tiendas (la mayoría ubicadas en Portugal y España) y tiene un total de 1.300 empleados. Alrededor de la mitad de los productos son de su propia marca, mientras que la otra mitad representa a las marcas internacionales. Para cumplir con los requisitos de reposición en todas sus tiendas, la empresa realiza aproximadamente 100.000 pedidos cada día de todas las categorías de producto.
Cada tienda mide, aproximadamente, 1.200 metros cuadrados, explicó Teles, y agregó que la inexactitud del inventario puede forzar a los vendedores a depender del tiempo que pasan “buscando lo que no está en stock en el piso de ventas”. Tres veces al año, las tiendas asignan empleados a realizar el recuento del inventario (alrededor de 25.000 unidades ubicadas en el piso de ventas de cada tienda y en el depósito). El proceso tardó tres días en completarse. Además, entre los recuentos de inventario, los empleados perdían tiempo antes o después de las horas laborales realizando recuentos limitados de todo en el piso de ventas.
Sport Zone contrató a una empresa externa de auditoría para que visitara las tiendas. Basándose en los resultados de esas auditorías, la empresa descubrió que incluso con los recuentos periódicos, el 20% o 30% de las unidades de mantenimiento de stock no estaban disponibles en el piso de ventas, a pesar de estar en la tienda, generalmente, en el depósito.
“Invertimos mucho en la rápida reposición de bienes desde el centro de distribución hasta la tienda”, afirma Teles. “Pero un buen porcentaje no llegaba a tiempo al piso de ventas”.
La solución consiste en la captura e interpretacion de la información leída. Luego, comparte los resultados con el sistema de planificación de recursos de la marca. De esta manera, la empresa sabe qué productos fueron enviados desde el centro de distribución o cuáles se recibieron en la tienda, basándose en las lectoras RFID.
La empresa decidió lanzar el piloto en dos de sus tiendas más grandes, cada una de aproximadamente 2.000 metros cuadrados. Teles explicó que optaron por colocar los tags RFID en los productos en el centro de distribución para que los tags pudieran ser leídos antes de que los productos fueran enviados a las dos tiendas.
Sport Zone midió la precisión del inventario al realizar recuentos del stock de manera manual y descubrir que había llegado a una precisión del 99% durante el piloto RIFD, en oposición al 80% antes de la implementación del sistema. Además, logró una reducción del 92% en los esfuerzos por contabilizar el stock. De acuerdo a Teles, el caso demostró que con un aumento del 4% en las ventas, la empresa recuperaría su inversión en tecnología en un año; por lo tanto, un mayor aumento en las ventas aumentaría su retorno de la inversión. La empresa también descubrió que antes de utilizar la tecnología RFID, ambas tiendas tenían aproximadamente 1.000 artículos en el depósito que deberían haber estado en el piso de ventas. Unos meses luego de la implementación, esto se redujo a solo 15 artículos.
La empresa está implementando la solución en otras ocho tiendas, con la idea de luego implementarla en todas. Esto requerirá una inversión de €2 millones para las 120 tiendas. Además, está comenzando a hacer que sus propios fabricantes etiqueten los productos, mientras que los productos que vienen de otras marcas pueden ser etiquetados en el centro de distribución. En este punto, explica Teles, el centro de distribución se ha comprometido a etiquetar el 30% de los productos que pasen por sus instalaciones, ya que el otro 70% puede etiquetarse durante la fabricación.